Neuquén 20 de diciembre de 2024
Queridos hermanos y hermanas:
“En el principio era la Palabra, y la Palabra estaba ante Dios, y la Palabra era Dios.
Ella estaba ante Dios en el principio.
Por Ella se hizo todo, y nada llegó a ser sin Ella. Lo que fue hecho.
Ella era la luz verdadera, la luz que ilumina a todo hombre, y llegaba al mundo.
a todos los que lo recibieron les dio capacidad para ser hijos de Dios.
Y la Palabra se hizo carne, puso su tienda entre nosotros, y hemos visto su Gloria: la Gloria que recibe
del Padre el Hijo único, en él todo era don amoroso y verdad” (Juan 1,1-3.9.12.14).
¡Cómo no sentirnos felices en este tiempo Navideño y en vísperas de vivir un Año Jubilar!, Demos gracias por el Amor infinito del Dios encarnado, que, en su vida ofrecida, nos invita a ser continuadores de ese Amor entre los hermanos, trabajando por la verdad que nos hace libres, y esa justicia, para que nos permita a todos peregrinar como hermanos en la esperanza.
Simplemente con esta breve carta, quiero en primer lugar acercarme a cada comunidad ofreciendo mi oración para que cada familia y cada corazón pueda experimentar la paz y la esperanza del Niño de Belén.
También quiero convocarlos a participar del sentir de la iglesia universal, que anhela iniciar EL AÑO SANTO, EL AÑO JUBILAR, en una comunión de espíritu y corazón.
Que podamos agendar:
Domingo 29 de diciembre
✓ 9,00hs. Nos encontramos en la parroquia San Pedro y San Pablo de Neuquén capital.
✓ 9,15hs. Salimos en la primera peregrinación del año santo hacia la catedral
✓ 9,50hs. Apertura de la Puerta Santa en la Catedral María Auxiliadora.
✓ 10,00hs. Misa de inicio del Año Jubilar.
Esta será la única misa en ese horario de la mañana, para todas las comunidades de la confluencia y alrededores. Invito a las comunidades del interior a que puedan reunirse en comunidad y unirse a través de las redes por donde se transmitirá dicha celebración jubilar, para que la fuerza de la oración en comunión eclesial sea expresión sincera ante Dios, para pedirle derrame su Misericordia abundantemente en este año en nuestra diócesis y en toda su iglesia.
Reciban mi abrazo fraterno y de paz en esta nueva Navidad, y la bendición del Niño de Belén junto a la Sagrada Familia llegue a todos ustedes.
